martes, 2 de abril de 2019

Las dagas de hace unos ayeres...

"Los logros intelectuales de tu hermano son mucho mas importantes para mi que tus logros culturales como eso de montar "operas" mediocres"...

Hola, mi nombre es Aurora, tengo 22 años y vivo con mis padres. Estudio Medicina (8vo semestre) y estudio canto porque voy a ser cantante de Opera, bueno eso si es que mis oportunidades me dejan. Tengo 7 años estudiando en un taller y buscando profesor para tener una base solida, he aprendido mucho durante este tiempo pero en realidad creo que me he quedado estancada mas de lo que he crecido. Mi historia comenzò cuando tenìa alrededor de 7 años...  Mis padres cantaban en el  coro de su iglesia y a mi siempre me llevaron a misa, veia como las señoras cantaban unas bonito y otras.. no tanto.. pero lo unico que sabia por seguro es que mi madre tenìa la voz mas hermosa de todas, era como estar viendo una pintura fresca de òleo con unos rayos de sol saliendo de ella y ese porte que tenìa, sì que la admiraba, claro, pero si trataba de tocar siquiera el pandero, el encanto se iba, era terrible. Un dìa me di cuenta que yo tambien podia cantar y comence a explorar las diferentes posibilidades de mi voz hasta que un día vi en televisiòn algo que marcarìa mi vida por siempre, una soprano. Yo no tenìa idea de lo que estaba viendo solo sabìa que no se parecia a la voz de mi madre ni a ningun otra que hubiera escuchado en mi vida, era una voz que te llevaba derecha, izquierda te elevaba hasta alturas que no conocias y luego delicadamente te regresaba a la tierra sobre una nube, era algo inexplicablemente bello, fue cuando entonces decidì que algun dia debia poder hacerlo, algun dia.
Pasaron los años y claro, lo olvidè, en la familia se escuchaba mas musica popular como Jose Jose, Los Apsons, Rocio Durcal, Ivonne e Ivette, Cri Cri, etc. posteriormente vino Wisin y Yandel, Aventura, Vicente Fernandez, Banda el Recodo, puro populacho en casa, fue cuando cumplìa 12 años que recorde que en la vida habìa mas cosas y le pedì a mi madre que me metiera a clases de canto a lo cual, para mi asombro, accediò inmediatamente...

A los dias me llevò a una universidad donde podria tomar las tan anheladas clases, iba por los pasillos ya conocidos, puesto que mi madre daba clases ahì y aveces nos llevaba, veia los murales, las plantas, los arboles, los arbustos de diferentes formas, la biblioteca, pensando en como seria mi nuevo salon. Porfin llegamos a un edificio de dos pisos color beige con unas estructuras metálicas muy peculiares, la emocion me hizo subir corriendo los escalones, resbale  pero pude seguir en pie corriendo, no habia tiempo que desperdiciar, ya en la puerta me detuve, deseaba mas que nada en el mundo entrar, pero me contuve y esperè a mi madre no me cabia la felicidad en mi diminuto cuerpo, mi ojos estaban de un color cafe casi negro resplandeciente  y una sonrisa de la cual solo yo sabìa, mi madre abre la puerta y adentro un grupo de gente de todas las edades concurridos alrededor de un piano cafè Steinway, voltea el maestro

-Buenas tardes-
-Buenas tardes maestro, yo soy la profesora Antonia de contabilidad y vengo a traerle a mi hija, me dice que quiere entrar a cantar- andale hija, pasale.  Era demasiada presiòn para mi, pero aun asi entrè con todo el valor que me fue posible colectar en esos instantes - Hola- -Como te llamas hija?-  -Aurora- -Y dime Aurora, cuantos años tienes?- -Doce- -Ya empezaste a reglar?-  Esa pregunta me cayò como balde de agua fria con escarcha y unas cuantas sanguijuelas, ¿que si ya reglaba? què tipo de pregunta es esa a una niña me preguntaba   -Disculpe maestro a que se debe su pregunta- contestò mi madre inmediatamente  -No se espante maestra lo que sucede es que lo pregunto para saber si hormonalmente la niña ya puede cantar- -Pues tiene poco de haber comenzado- -Hmm, vamos a escucharla- El maestro toco algunas notas y me pidiò que las repitiera exactamente como las escuchara y para su sorpresa lo hice bastante bien -Tiene una hermosa voz y podria ser una muy buena cantante, pero desgraciadamente en este momento no puedo recibirla no debe cantar, debe esperar hasta haber cumplido un año desde su primer periodo- Si la pregunta que me habia hecho fue demasiado impacto, esta noticia me destrozò completamente ahora no era un balde, era una tina llena de cuchillos y tenedores por todo mi cuerpo, no pude mas que salirme y sentarme a llorar en el pasillo, mis valor se volteo y se exponenció a una tristeza tan profunda, que aun recuerdo hasta lo que traia puesto, unos jeans azules deslavados, tenis de agujetas, una playera gris y un suéter rojo con gorro, recuerdo mi imagen, tirada en el pasillo sollozando sin poder contenerme, toda mi alegria truncada en unos segundos, mi vida artistica habia terminado antes de comenzar.

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